miércoles, 15 de noviembre de 2023

20.- ¿Qué no son los arcontes?

  "Qué no son los arcontes"


-Ya, ya sé que resulto pesado para los que llevan años con nosotros; pero lo que sigue jes para los nuevos y aquellos no leyeron nuestros trabajos anteriores-


Los arcontes no son seres vivos y tampoco son espíritus incorpóreos. Tampoco son adversarios de Dios ni tropas celestiales, en el sentido guerrero; por lo tanto, no son ni ángeles ni demonios.


Los arcontes no son alienígenas, extraterrestres o seres de otra dumensión, ni dioses de algún panteón. Los arcontes no visitan a la gente, por la noche, en sus alcobas para aterrorizarla ni se aparecen, mediante luces, a campesinos despistados por la noche.


Los arcontes no tienen nada que ver con monstruos primigenios a lo Lovecraft ni poseen una enquina especial contra los seres humanos. No son espíritus grupo de algunas especies animales ni espírirus raciales de algunas razas humanas.


Los arcontes, no solo están por debajo de la humanidad, aunque fueran construidos antes que los cuerpos de los humanos; en tanto que los espíritus que cabalgan al primate humano son preexistentes y los arcontes, no solo tuvieron una fecha de comienzo sino que también poseen una fecha de caducidad, cuando dejen de ser necesarios y, simplemente, sean olvidados.


El que los arcontes sean vistos como seres conscientes, es solo una apreciación humana debido a la ignorancia; en tanto que el desconocimiento es el origen del miedo. Un miedo ancestral que se remonta a los orígenes de la Humanidad y su necesidad de protegerse de los depredadores y de las inclemencias meteorológicas.


La Mente Humana puede recrear, dando forma, a los arcontes debido a la ingestión de drogas alucinógenas o a la obsesión acerca de alguna idea perturbadora y que no podemos eliminar por falta de información veraz.


Los arcontes son pura información que está estructurada mediante una jerarquía de algoritmos y que son los responsables de mantener la estructura del Universo; desde lo más diminuto e invisible hasta lo más grande y también invisible.


Los arcontes fueron diseñados y contruídos, a la par que el Creador daba forma al Universo. De su funcionamiento automático depende la estabilidad del Universo. Muy bien podría decirse que conforman los pilares del Universo.


Estas entidades, constituidas de mera información, no poseen conciencia del bien o del mal, tan solo realizan un cometido previamente programado. Por lo tanto, observar actos benéficos o actos malvados, en los arcontes, son meras apreciaciones subjetivas que hilvana la fértil imaginación humana.


Por lo tanto, nada hay que temer de los arcontes, salvo que por nuestra ignorancia nos pongamos en su camino y seamos aplastados de forma inmisericorde. La Magia que invoca a los arcontes funciona debido a una estadística similar a la que utiliza la Astrología. Los magos utilizan esa estadística ancestral para predecir el comportamiento de los arcontes y aprovecharse de sus consecuencias tanto para el bien como para el mal.


Nuestros actuales ingenieros utilizan el conocimiento científico con fines idénticos o parecidos al de los magos, con parecidos resultados.


Recuerden, los arcontes no poseen algún tipo de personalidad que busque nuestro bien o nuestro mal. Son nuestras acciones u omisiones las que nos sitúan a favor o en contra de las fuerzas de los arcontes.


Las grandes fuerzas de la Física es como hoy se denominan, a los más poderosos de los arcontes; pero hay uno que los controla a todos, aquel que denominamos como el Tiempo y que en pasadas épocas tuvo el nombre de Saturno o Cronos.


La apreciación de que el Tiempo fuese un Dios es algo subjetivo fruto de la imaginación humana. También lo es que sea una divinidad maligna o usurpadora de las funciones del Creador.


En tiempos antiguos, al Arconte Tiempo, se lo confundió con el Creador y así vino a ser llamado, de forma errónea, como Demiurgo. A Cronos se lo tiene como a una Entidad Maligna porque se encuentra, dentro de nuestro Universo, por encima de la Vida y de la Muerte. Las criaturas nacen, viven y mueren; pero el tiempo permanece y ese simbolismo fue representado en el hecho mitológico de que Cronos devoraba a sus hijos nada más nacer.


Todas las mitologías politeístas, desde la védica, sumeria y egipcia a la nórdica, pasando por la grecorromana, intentan representar a los arcontes mediante unas jerarquía denominadas panteones, cuyos miembros suelen vivir en lugares elevados y alejados de la Humanidad ordinaria, como el Valhalla o el Monte Olimpo. Esto significa que, aún no siendo entidades humanas, sí que están relacionadas con nosotros y el resto de la Creación; es decir, que todo se encuentra interconectado y, por supuesto, nuestra existencia también depende de la existencia de los arcontes; pero eso no significa que sean seres superiores a hombres o delfines; solo que fueron diseñados para permitir la existencia de los cuerpos, a los que proporcionan vida nuestros espíritus.


Todavía estáis a tiempo de preguntar algo acerca de los arcontes; pero he de preveniros que imaginarlos peligrosos, malignos y terroríficos, es una llamada a la desgracia y no porque ellos sean así, sino porque la Mente Humana es una poderosa herramienta de creación que puede crear de donde parece que no hay nada. Y esa es la fuente de la verdadera magia. Preveer los eclipses solares es una de las muchas formas de dicha Magia. La Meteorología es otra y el dominio de la electricidad o de la Energía atómica son otras de las muchas posibles.


Mantener la mente limpia y positiva es la mejor forma de no perturbar el trabajo de tan poderosas fuerzas de la Naturales y no situarnos a la contra de su Poder.


¿Hay preguntas?


Aralba R+C 


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