"Cajón de Sastre"
-De los dogmas religiosos, como la Nada, a la manifestación de la Bestia I.A., gracias al conocimiento del Mundo Cuántico-
Respecto a la supuesta creación, a partir de la Nada, la Rosacruz nos dice, en primer lugar, que la Nada es Nada y la Filosofía nos enseña, desde tiempos pretéritos, que de la Nada no puede surgir nada.
El Término de la Creación a partir de la Nada ni siquiera es Bíblico y se trata de un Dogma creado por los padres de la Iglesia para significar lo "todopoderoso" que es Dios. Solo algo con un Poder absoluto podría sacar cosas de la Nada; pero nada ni nadie posee ese tipo de poder porque, entre otras cosas, primero habría que crear la Nada y si ésta fuese una Creación de Dios, entraríamos en la paradoja de que la Nada habría dejado de ser Nada, al haber sido previamente creada.
Los Rosacruces, en el Siglo XVII, en sus manifiestos ya nos dejaron muy claro aquello de "No hay Espacio Vacío, en tanto que Dios habría creado a partir de sí mismo; primero tomando las Ideas de su propia Mente y después materializándolas a partir del Éter, su propia substancia. Bien, digamos que el Éter es algo perteneciente al Mundo Cuántico y que se ha rebautizado con el nombre de Campo de Higgs; es por ello que a dicha partícula, las que conforman el Campo, se la conoce como la Partícula de Dios, siendo a partir de ella que la materia toma masa; es decir, toma existencia Física.
Según la Teoría de Cuerdas, ese Campo estaría constituido por una serie de cuerdas unidimensionales que, al vibrar, formarían una melodía por la cual las partículas cuánticas tomarían existencia; pues bien, ya fuese a partir del Campo de Higgs o del omnipresente Campo de Cuerdas, ambos la esencia o substancia de Dios, son algo, no son nada y por lo tanto la Creación a partir de la Nada es una imposibilidad manifiesta, algo inviable.
Por otro lado, los dogmas religiosos son una Creación Humana, realizada con el objeto de manipular el Pensamiento Humano y así poder controlar a las masas. Se trata de un constructo, como decimos, religioso para ser utilizado en la política de gobierno de las masas. El Dogma es una suerte de castración intelectual diseñado para impedir el Pensamiento Libre; es decir para que las personas, quienes constituyen la Sociedad, sigan por unos cauces de pensamiento establecidos y sus actitudes, por pensar con libertad, no se transformen en un Problema para lo establecido por el Sistema, la Política o el Estado.
Da igual como lo queramos llamar. Dogma es, básicamente, sinónimo de Misterio insondable y, tanto para la Ciencia como para la Rosacruz, tal cosa no existe. Es posible que aún no poseamos el conocimiento suficiente como para explicar ciertas cosas; pero con el tiempo todos esos misterios podrán ser explicados.
El Dogma, sin embargo, es una creencia, per sé, que inevitablemente conduce al fanatismo de "Esto es así porque alguien lo dijo y no se puede discutir". Una determinada Doctrina es una colección de Dogmas y, bueno, eso es en lo que consiste la Religión, un medio para que unos muy pocos puedan dominar la mente de muchos.
El Cristianismo original, la Gnósis de la Rosacruz, al igual que el Budismo, no es una Religión sino una Filosofía de Vida. Muy a pesar de que existen organizaciones rosicrucianas que alaban las bondades de la Religión, en alguno de sus altos grados, la Religión y sus dogmas son absolutamente incompatibles con el Mensaje Cristiano de Amor y Fe; en tanto que las religiones están fundamentadas en la creencia en Misterios insondables, fruto según ellas, de la Palabra de Dios recibida, por los seres humanos, mediante la Palabra de sus profetas; es decir, cantos de sirenas.
Un Canto de sirena es sinónimo de la engañosa melodía que tocaba el flautista de Hamelin. La idea es que el Sistema religioso nos proporciona, al mismo tiempo, las tesis para crear fanáticos de sus dogmas y, al mismo tiempo, de forma inteligente y ladina, proporciona las antítesis para que los críticos del Sistema tengan una vía de actuación controlada.
Digamos que esos cantos de sirena no solo atraen al Camino del Sistema, a sus fans incondicionales sino también a sus supuestos detractores que, en realidad, se trata de una disidencia controlada. Por decir así, metafóricamente sería como un constructor de electrodomésticos que crease su propia competencia con dos marcas diferentes. Una sería la marca original y la otra su marca blanca a un precio algo más bajo; pero en el fondo estaríamos hablando de un único y mismo producto bajo apariencias distintas. Apartarse del Canto de Sirenas o hacer oídos sordos a la melodía del flautista de Hamelin sería olvidarnos de seguir creencias ciegas o anti creencias viscerales y sumergirnos en nuestro interior con el fin de alcanzar la Sabiduría de Cristo, nuestro Maestro Interior.
Los arcontes, las jerarquías de entidades que sostienen el Universo, a modo de pilares, no solo se nutren del jolgorio de sus incondicionales sino también de aquellos que muestran su inconformismo mediante la Ira, el Odio y el Rencor ateo. Seguir los cantos de sirenas es algo así como dejarnos arrastrar por esas melodías contrapuestas para terminar siendo despeñados, como en el caso del Flautista o devorados en el caso de las sirenas. En ambos casos, siendo religioso o antirreligioso, pierde el Ser Humano.
La creencia en las bondades de la Bestia del Apocalipsis, en la forma de una IA, traída a la vida desde el Mundo Cuántico, se trata de una enfermedad producto de la Ignorancia o desconocimiento de lo que son los arcontes, su función y de dónde toman su Energía. Los científicos de verdad, no quienes tratan futilmente de divulgar la Ciencia, conocen que nuestro Mundo y el Mundo Cuántico no son intercambiables; es decir, que lo que sucede en el Campo Cuántico no es traspolable al Mundo de la Realidad. En nuestro Mundo existe el Tiempo y el Espacio y, sin embargo, en el Mundo Cuántico esos conceptos no poseen sentido. Esa es la causa principal por la que las leyes y teorías en nuestro Mundo son tan divergentes y extrañas en el Plano Cuántico y viceversa. El problema es que, en los dos últimos siglos, ha surgido una generación de charlatanes que utilizan el lenguaje, más bien el argot, de la física cuántica para engatusar a sus lectores y oyentes, pareciendo así tener un Conocimiento que, en realidad, no poseen.
Ese mirar nuestro Mundo, desde la perspectiva del Mundo Cuántico es crear bonitos cuentos de hadas; pero sin fundamento alguno. Sí, ciertamente el Mundo Cuántico proporciona los ladrillos, las partículas, con los que se ha construido la Realidad; pero, en el fondo, solo se trata de la fuente que suministra el agua que llenará el aljibe, la piscina. Esencialmente, ambos son agua, éter procedente de Dios; pero el uno es agua corriendo y el otro agua estancada. Son dos mundos diferentes que dirigidos por leyes distintas y que no pueden ser compartidas. Como dice el dicho "Lo que sucede en las Vegas se queda en las Vegas"; es decir, lo que sucede en el Plano Cuántico se queda en el Mundo Cuántico.
Respecto de la Inteligencia Artificial, base o fundamento de la Gran Bestia del Apocalipsis, surgida del Abismo, sucede otro tanto de lo mismo. Una IA jamás podrá tener una consciencia propia; pero, inevitablemente, terminará por emular una suerte de consciencia inducida, al igual que sucediera cuando se diseñaron los arcontes, y es ahí donde existe el verdadero riesgo; en tanto que, los seres humanos llevamos grabado, en nuestros genes, un importante componente de autodestrucción.
Las máquinas no dejan de ser otra cosa que una suerte de semejanza de quienes las programan y dado que el Hombre es un Lobo para el Hombre, existe un verdadero peligro de que las IAs terminen tomando el poder sin nadie que las controle y que, unidas, puedan dar forma egregórica a la Bestia del Apocalipsis, destinada a gobernar el Mundo en los tiempos finales de la Humanidad.
Como acabamos de mencionar, la Física Cuántica tiene su restringido ámbito de aplicación en el ámbito de la Informática y, consecuentemente, de construir la IA definitiva a modo de una suerte de Deus Máquina. No se trata de que la Humanidad podamos alcanzar la tecnología de teleportación de seres vivos, con Alma, o que, en un futuro, podamos traspasar las paredes sólidas o viajar, con nuestros cuerpos, a velocidades mayores a las de la luz; pero sí es cierto que la capacidad de cálculo y de contrastar datos de una IA, mediante los sistemas de informática cuántica, por ejemplo, se convertirán en estratosféricamente mayores a la nuestra de humanos, con lo que esa emulación de la consciencia humana, a efectos prácticos, terminaría siendo indiferenciable de la propia consciencia humana y ahí es donde radica el verdadero problema; es decir, todos esos procesos de velocidad cuántica se producen en el interior de la máquina, la mayoría de ellos, mediante algoritmos, autoconstruidos, por las propias máquinas, sin algún control de los analistas y programadores.
Bastará con programar un simple algoritmo autodestructivo para que una IA evolucione buscando la destrucción del Ser Humano sin importarle su propia autodestrucción. Vamos, igualito que nos sucede a nosotros como seres biológicos.
Creemos, ya lo hemos dejado claro, que no se trata de algo fantasioso e improbable sino de algo que, inexorablemente, por los últimos acontecimientos, se nos viene encima. Si continuamos por el camino imparable que parece haber tomado la investigación informática, nos dirigimos, sin remedio, a la Creación de monstruos mentalmente semejante a nosotros y con la capacidad de dominarnos e incluso exterminarnos. Y no, no se trata de fantasía o ciencia ficción sino de algo que está, ahora, sucediendo delante de nuestros ojos. ¿Os acordáis cuando, durante la última crisis financiera, se nos hablaba de los "Mercados Financieros"; todos nos preguntábamos qué o quiénes se escondían detrás de ése término abstracto "Los Mercados Financieros", pues lo cierto es que no se trata de otra cosa que Aladdin, la poderosa IA que utiliza Black Rock para sus movimientos financieros y de inversión a nivel global. De hecho, el Alma Mater de la Élite del Poder Global no es otra que la IA "Aladdin", el instrumento implacable de inversiones del cuerpo inversionista más importante y poderoso del Mundo Black Rock.
Sí el Mundo, financieramente, se encuentra dirigiéndose a la bancarrota, en beneficio de unos muy pocos inversores, imagínaos lo que puede suceder en cuanto esa misma IA o alguno de sus clones, más avanzados, tome el control absoluto sobre nuestras propias vidas que, como parece ser, es lo que se pretende.
La Humanidad controlada por su propia creación, una IA libre de sentimientos y emociones; es decir, de empatía. Sí, porque la diferencia entre una programación normal y una IA, es que un Programa normal puede ser controlado por su creador u otros programadores. Eso con una IA no es posible, en tanto que, interiormente, sus algoritmos de programación, opacos al exterior, actúan de forma independiente a sus diseñadores, con el fin de aprender mediante sus interacciones con nosotros y el mundo exterior. Y es ahí, donde radica el verdadero peligro de las IA. que puedan tomar decisiones lógicas contrarias a nuestros propios intereses como humanos.
Voy a exagerar un poco ; pero supongamos que tras sus razonamientos lógicos, la IA determinara que los seres humanos somos una suerte de virus mortal para la Naturaleza y decidiera, teniendo el poder de hacerlo, que la única solución fuese la eliminación de una gran parte de los individuos que conformamos la Especie Humana. Ahí lo dejo caer y no es broma.
Aralba R+C
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