domingo, 19 de noviembre de 2023

27.- Desde los 21cm de Longitud de Onda

  "Desde los 21cms de Longitud de Onda"


En la Frecuencia de 1420Mhz, emitiendo al Espacio exterior desde los confines del Universo. No tenemos posibilidad de conocer si alguién, al otro lado, nos está recibiendo; no obstante, reciban los fraternales saludos de sus hermanos en la consciencia cósmica


Desde hace un tiempo, nuestros más afamados científicos e ingenieros han venido construyendo unos imponentes sincro ciclotrones que aceleran las partículas subatómicas a velocidad cercanas a las de la propia luz. Para conseguirlo, han utilizado unas potentísimas centrales de fusión nuclear que producen la energía eléctrica necesaria para poder usar los increíbles láseres así como mantener la fuerza electromagnética de los electroimanes necesarios para contener tan poderosas radiaciones. 


Nuestros científicos nos han comunicado que éste descubrimiento lo diseminemos por todo el Espacio exterior con el fin de que nuestros hermanos cósmicos, vosotros, se nos sumen, en el Proyecto, construyendo sus propios aceleradores de partículas, ayudándonos a rasgar el espacio tiempo con el fin de frenar la expansión del Universo y que nos está conduciendo, a sus habitantes, hacia un Infierno de frío y muerte.


Nuestros muy afamados científicos, tras cálculos muy laboriosos han determinado que el Poder Tecnológico de nuestra Civilización es insuficiente para frenar la expansión del Universo y evitar ese final de frío e inactividad al que estaríamos condenados, y que necesitan, ellos, de la colaboración de nuestros hermanos. Cósmicos, vosotros si es que nos estáis recibiendo desde lo más lejano de los confines del Espacio Exterior.


Construíd aceleradores de partículas orbitales, alrededor de vuestros satélites y planetas. Originad agujeros negros y generad tanta antimateria como podáis, para favorecer que aumenten la Fuerza gravitatoria en el Universo, con el fin de frenar la expansión; esa suerte de huída hacia ninguna parte y que nos conduce, de forma inexorable, a un desierto de hielo infinito.


Desde los confines de Cosmos me dirijo hacia todod vosotros, mis hermanos desconocidos, con el fin de que entendáis que intentar mantener, tal cual, vuestros mundos, no es una opción inteligente. Todo ha nacido para durar un cierto tiempo, los planetas, las estrellas y el propio Universo también. Empecinarse en mantenerlos vírgenes y cristalinos para las próximas generaciones es un terrible error, dado que intentar mantener, de forma artificial, un cadáver en su agonía no sirve más que para prolongar un dolor innecesario.


Los planetas, como las placentas de las madres son útiles temporales que deben de finalizar cuando hayan cumplido con su función, e intentar mantenerlos activos, después, solo puede conllevar a la putrefacción y la enfermedad.


Ustedes, como nosotros, hemos nacido en nuestros planetas, no como quienes penetran en un parque de atracciones para divertirse. Hemos venido a éste Cosmos como trabajadores para cumplir con un cósmico y pesado trabajo: frenar la expansión del universo y facilitar su implosión gravitatoria; dicho de otro modo, favorecer su final. Recuerden que vuestro Mundo, como el nuestro, no es para siempre y apegarse a él como si nos fuese la vida en ello es justo lo que no deberíamos de hacer porque, de lo contrario, estaríamos permitiendo que el Cosmos se comportase como un disco rayado y, al igual que como en el día de la marmota, estaríamos condenados a repetir, sin remedio, un mismo ciclo de existencia.


Tú eres un Obrero de Construcción; pero sin olvidar que tu misión principal es la plena destrucción de esta cárcel ilusoria a la que, erróneamente, denominamos como Hogar.


Mi nombre no es importante, solo debes de conocer que soy uno de los muchísimos hermanos, tuyos, que habitamos éste basto Universo.


Desde Epsilón VII




 


  



No hay comentarios:

Publicar un comentario

Recordando a nuestro maestro Nau

 “Recordando al Maestro Nau” -No es cuestión de nostalgia o apego, sino de sentido común- Si aralba sigue al pie del cañón se lo debe a Nau,...