48.- Sobre linajes, patentes y otras zarandajas

  "Sobre linajes, patentes y otras zarandajas"

Hace ya bastantes años fui invitado por un Amigo, Hermano y Frater a ser entrevistado por un Superior Desconocido y para ello debía de entregar mi currículum esotérico.

Por aquella época solo era miembro de la Masonerìa Regular española y miembro honorífico de la virtual Fratres Lucis; pero había pertenecido a tres de las fraternidades rosacruces más importantes en España; en algunos instantes, hasta de forma simultánea.

Estaba acostumbrado a ver extensos currículums con cargos de un altísimo rango y me puse manos a la Obra; pero no como os lo estáis imaginando...

Quise hacer una suerte de broma y compré papel especial y realicé, con letra gótica, un bonito trabajo donde decía que era Duque de no se donde, Soberano Gran Comendador de la Orden de no se qué y Superior Maestro Desconocido de todas las rosacruces existentes y por existir.

Imagináos un bello trabajo de caligrafía informática y visto desde lejos. Impresiona bastante hasta ser leído, en que el supuesto lector solo tendría dos opciones: o partirse de la risa o sentirse ofendido si fuese de aquellos de cara agria y nulo sentido del humor.

Con sinceridad, no sé qué debió de pasar con aquel currículum ni como reaccionó aquel honorable superior desconocido del Martinismo, la OTO, la FRA y no recuerdo cuantas fraternidades más. Ni lo supe ni tampoco me importaba demasiado. Quizá, me quedé con un poco de curiosidad insatisfecha.

Como todos debèis de saber, yo provengo del Mundo Protestante, donde las palabras de la Biblia son tomadas como algo divino, sagrado; es decir, Palabra de Dios y en la que se dice taxativamente "Vanidad de Vanidades, todo es Vanidad"

Mirad, a mí todos esos títulos y grados rimbombantes deberían de provocarme una carcajada o al menos una sonrrisa; pero lo único que me provocaba y, me sigue provocando es pena y asombro por lo ridículo del asunto. Dicho de otro modo, para mí Persona, la ostentación de títulos, sean del Mundo Profano como del Iniciático me produce rechazo y lástima.

Casi todas las fraternidades iniciáticas hacen alarde de unos linajes más o menos antiguos concedidos por personas que ostentaban una innumerable cantidad de rangos y cargos rimbombantes que, si lo piensan bien, habrían sido necesarias varias vidas para conseguirlos, salvo que hubiesen sido concedidos a título honorífico y conseguidos a golpe de billetera.

No, no me merecen ningún respeto quienes van alardeando de enormes curriculúms con la intención de sorprender, porque a mí sólo me parece ver en dichos casos ignorancia, egocentrismo y, por lo tanto, narcisismo y un infinito afán de notoriedad y de sentirse por encima de los demás. Dicho de forma más clara, una enorme falta de auto estima.

Para mí las patentes, linajes y certificados-diplomas solo me sirven para saber con qué personas no debo de relacionarme. Justo, quizá, lo contrario de lo que pretendieran conseguir.

Contando con que todos, absolutamente todos y sin excepción, llevamos la divinidad Plena en nuestro interior ¿quien o quienes pueden estar por encima de nosotros y sobre todo en conocimientos esotéricos, místicos o espirituales? Absolutamente nadie.

Sólo nuestro Yo Superior, Ser Interno o Ángel Guardían es quien está capacitado para concedernos grados de iniciación, elevación o exaltación y eso sucede en soledad y en la más absoluta intimidad.

El Verdadero Rosacruz, el verdadero Masón no va publicitando por ahí que lo es y que tiene tal grado de elevación o iluminación, porque la iluminación espiritual, el reconocimiento o recuerdo de nuestro verdadero Ser no depende ni de papeles bellamente decorados ni de decisiones externas a nosotros. Decisiones determinadas por gentes que a los sumo, repito a lo sumo, son iguales a nosotros.

No, ningún Ser Humano o Institución Terrena tiene el poder o la capacidad de conceder iniciaciones, elevaciones y exaltaciones espirituales.

Así es que Querido Amigo, si en alģun momento te has dirigido a mí indicando que eres tal o cual, con unos grados elevados de órdenes muy importantes..., piénsa un poco el verdadero concepto que tengo de tí como persona e individuo de la Especie Humana.

Si además te has dirigido a mí de forma anónima e invisible con una actitud paternalista, pues ya podrás imaginar el gran concepto que tengo de tí, de tus elevados grados y de las super sagradas y honorables instituciones que te los han concedido. Sólo puedo verte como un pobre tonto timado y reconvertido en timador de otros. En realidad sois máquinas de hacer dinero del simple humo. Sí, sois Masonería de Humo.

Los diplomas y linajes no te los podrás llevar, contigo, a la tumba porque no son la demostración efectiva de tu nivel espiritual y con mucha probabilidad ni siquiera servirá a tus nietos para enorgullecerse de los supuestos talentos de su abuelo. Esos papeles, con mucha probabilidad, terminen siendo vendidos como papel o cartón, sirviendo para alimentar alguna estufa de leña o, en el mejor de los casos, para unirse al patrimonio de algún coleccionista que no habrá tenido el placer de haberte conocido jamás.

Tenía que decirlo

Paz Profunda

Aralba R+C