"Iglesia R+C del Espíritu Santo"
-Pater, Filius y Espíritus Sanctus-
Existe una Iglesia Rosacruz, de carácter gnóstico, que no posee paredes de piedra, ladrillo o madera y que se encuentra libre de dogmas dictaminados por los seres humanos.
La Iglesia Rosacruz, en modo alguno, posee una ubicación determinada que no sea otra que tu corazón y mi corazón. Desde que el Cristianismo existe, ese Lugar se conoce como el "Templo del Espíritu Santo".
Éste Templo es un Lugar de Oración y de Adoración; se trata de un Lugar personal e intransferible, interior, y al que, para ver y sentir solo debes de encender la Luz del Entendimiento.
En las religiones exteriores, a Dios se lo muestra como único, no podría ser de otro modo; pero dividido, paradójicamente, en tres personas diferentes: Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Tal incongruencia no es aceptada por el Maestro Interior, Cristo, el cual, razonablemente, nos indica que Dios, el Todo y el Uno, posee casi infinitas características y, dentro de las más importantes, se encuentra ser el "Padre" de todo, el "Hijo" su propia Creación con todas sus Criaturas y el "Espíritu Santo", en tanto que la Esencia de Dios manifestada.
Por lo tanto, no hablamos de tres cosas diferenciadas sino de tres aspectos de una misma cosa que son imposibles de dividir; es decir, los tres aspectos, como las casi infinitas características divinas, son simultáneas e indivisibles.
Pues bien, Dios, en su conjunto, todo Él, mora en el Templo del Espíritu Santo y que se encuentra en todas partes y en ninguna a la vez; esto encierra una verdad y es que el Espíritu de Dios lo permea todo, encontrándose en todo lugar; pero nunca fuera de Él, en tanto que el afuera de Él, el Vacío, la Nada no tienen posibilidad de ser.
Así el Templo del Espíritu Santo, no se trata de un Lugar determinado situado en la Tierra, en los cielos ni en algún otro lugar concreto; sino que se encuentra dentro de tí, de mí y de cada uno de todos nosotros, pues Dios se encuentra en todas partes y allá donde se encuentra Él, se encuentra también su Templo.
Espero que seas consciente de que tú mismo, al igual que yo, en tanto que criaturas de Dios somos ese Templo del Espíriru Santo, pues su Esencia Divina mora en todos nosotros. Así, el Padre mora en ese Templo de sus criaturas y, en modo alguno significa que exista un Dios en cada Templo; dado que no existen muchos templos sino uno solo, ubicado en tu Corazón, en el mío y en el de todos nosotros.
Del mismo modo que solo existe un Templo del Espíritu Santo, así existe un único Padre, un único Hijo y un único Espíritu Santo, reflejados, virtualmente, como una individualidad sin dejar de ser, en Verdad, un único Colectivo, el Todo.
Así, aún siendo llamativa y motivadora la Oración y Adoración colectivas, estas son, pura teatralidad, innecesaria. Siendo la única Oración y Adoración, a Dios, efectivas, las que se producen de manera interna, en lo callado y en lo profundo de nuestro interior, en el Templo del Espíritu Santo y donde mora Dios al completo, con todos sus aspectos de Ser Sempiterno y, por lo tanto, Eterno, Preexistente e Inmortal. En Dios no existe ni el vacío ni la nada porque él es inmanente en todo Él y en toda su Creación y, por lo tanto, Omnipresente y Omnisciente de todo lo que sucede en su interior y, por lo tanto, también en el tuyo y en el mío. Dios, en su Poder es creciente y por lo tanto Omnipotente, en tanto que no puede haber algo más poderoso que Él, salvo Él mismo. Dios, en definitiva son tanto el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo y, en tanto que Plenitud o Pleroma, solo puede encontrarse, al completo, en su Templo; es decir, dentro de tí, dentro de mí y en todas partes, en todo lugar posible. Dios siempre va con nosotros aunque no seamos, en tanto que Personalidades, conscientes de ello.
Es por dicha causa que nuestro "Colegio Invisible de la Rosacruz" jamás tendrá otra Sede Física que tu corazón, el mío y el de todos aquellos que, siendo conscientes del Maestro Cristo, se recogen en su interior para hablar con Dios, darle gracias por ser conscientes, como Personalidad, de nuestra existencia y adorarle; que es lo mismo que decir, respetarlo, tanto a Él como a su Templo, su Cuerpo, en tanto que son una misma Cosa. Es por ello que Jesús dijo que sólo había dos mandamientos: "Amarás a Dios por sobre todas las cosas y a tu Prójimo como a Tí mismo". Con ésto último se concluye que no podemos amar a nuestros prójimos ni a Dios, si no somos capaces de amarnos a nosotros mismos; de ahí el dicho tan extendido de "El Amor comienza por Uno mismo"
Si no nos amamos es porque no somos conscientes de lo que realmente somos, tal y como también dijo Jesús, "templos del Espíritu Santo"; pero, en tanto que ya dijimos que Dios, en todas sus facetas, también la de Cristo, el Hijo, solo posee un Templo, digamos que para diferenciar el Templo Único de Dios de las apariencias individuales, es que hablamos de "Iglesia", como algo tan sagrado que supone el conjunto, al completo, de todos los templos levantados a Cristo, hechos conscientes, y que conforman el Único Templo de Dios.
Todos, absolutamente todos, dentro de nosotros poseemos, dentro nuestro, el Templo de Dios, ya sea vacío, en ruinas o repleto de la Vida refulgente de Cristo, el Señor y Maestro.
Por lo tanto, nuestra Iglesia Rosacruz, constituida por todos los Templos iluminados, con la Luz de Cristo, son el Templo del Espíritu Santo y la Iglesia de Dios. Una Iglesia espiritual y que no requiere de templos de piedra, ladrillo o madera diseminados por todo el Planeta.
Todos y cada uno de los estudiantes de nuestro Colegio Invisible de la Rosacruz, sumados a todos los individuos conscientes de la Verdad de Cristo, conformamos, con nuestros templos, en conjunto, la Iglesia de Cristo.
Por lo tanto, mis hermanos y amigos, no busquéis al Templo de la Rosacruz fuera de vosotros en alguna Religión externa, ya todo viene religado de origen y lo contrario solo es apariencia. Sí tenéis necesidad de hablar con Dios para pedirle consejo o sentiros plenos, recogeos en vuestro interior y, con toda confianza; pero con respeto, exponerle vuestras inquietudes y problemas para que Él ilumine a vuestra Personalidad con el fin de resolver, favorablemente, cualquier situación. También, siendo agradecidos, adorad al Señor para fortalecer vuestro Templo y hacerlo visible, como ejemplo, a todos los que os rodean y observan.
No me pidáis, en tanto que frágil personalidad de Humano, que construya un Templo físico externo, de la Rosacruz, donde poder reunirnos, en tanto para cargarlo de egrégores mortales y efímeros, condenados, en algún instante, a su disolución.
Vosotros y yo, también los otros, los de fuera, todos y cada uno de nosotros, somos ese Templo del Espíritu Santo de la Rosacruz y entre todos confirmamos, con nuestros templos divinos, la única Iglesia de Cristo, nuestro Señor.
Aralba R+C
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